En un comunicado, la FPF precisó que el caso será estudiado por el Consejo Disciplinario, de cuyo dictamen dependerá su decisión final. Según medios lusos, Luisao podría llegar a ser castigado con hasta tres años de suspensión, dependiendo del criterio del Consejo.
El incidente tuvo lugar el pasado 11 de agosto, en un amistoso que disputaban el Fortuna y el Benfica en Dusseldorf (Alemania). En torno al 39', una falta pitada por el árbitro Christian Fischer en contra del equipo lisboeta -la segunda tarjeta amarilla para el español Javi García- fue protestada airadamente por Luisao, que acabó empujando al juez central, quien se desplomó en el suelo seminconsciente, fue atendido y acabó por dar por suspendido el duelo ante la incredulidad de los jugadores del Benfica.
Luisao declaró nada más terminar el encuentro que tiene "la conciencia tranquila" por lo ocurrido y subrayó que no hizo "ningún tipo de movimiento" para agredirlo.
La prensa alemana ha publicado estos días que además de la investigación de la FIFA -delegada ahora en la FPF-, Fischer también ha presentado una denuncia ante la justicia ordinaria de su país, ante la que aseguró haber padecido una conmoción por el golpe.