Los de Ferguson dominan la liga inglesa con solvencia, doce puntos por delante del segundo clasificado, Manchester City, y esperan que el encuentro ante Norwich les sirva para hacer rotaciones y dar descanso a sus principales estrellas antes de disputar la vuelta de los octavos de final de la Chmapions.
El conjunto que dirige el irlandés Chris Hughton, sin embargo, no puede permitirse ceder demasiados puntos en el tramo final del campeonato si no quiere perder el colchón de ocho puntos que le separa de los puestos de descenso, y tratará de arañar un buen resultado en Manchester.
Advertido de que el del Norwich, que ya puso contra las cuerdas al City en diciembre (3-4 en Carrow Road), puede ser un partido trampa para los suyos, el veterano Ferguson ha asegurado que lleva toda la semana tratando de que el equipo se concentre únicamente en el compromiso del sábado.
"El partido del martes no necesita preparación especial. Pero mañana es una situación mundana, un asunto práctico, y necesitamos ganar", apuntó el técnico, de 71 años.
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El United no tiene bajas destacables de cara a la vigésima octava jornada de la liga inglesa, más allá de las de Paul Scholes y Phil Jones, con molestias en la rodilla y en el tobillo respectivamente, que podrían obligarles a descansar este sábado pero que no les impedirán estar disponibles el próximo martes.
El otro eje de gravedad este fin de semana en la Premier estará situado en Stamford Bridge, donde ‘Rafa' Benítez se enfrentará una vez más a su propia afición, pocos días después de haber mostrado públicamente su frustración por la situación que vive en el banquillo ‘blue'.
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Desde que llegó a Londres el 21 de noviembre, el español ha sufrido los abucheos de sus propios aficionados, que no le perdonan su pasado como técnico del Liverpool, y ha visto cómo el club le colgaba la etiqueta de "interino", lo que ha minado su autoridad dentro de un vestuario tradicionalmente difícil de manejar.
Inmersos en un ambiente enrarecido, los "blues" se enfrentan el sábado a un encuentro crítico ante West Bromwich, en el que una derrota podría acercar a Chelsea a la quinta plaza, fuera de los puestos que dan acceso a la Champions.
Al acecho estará Arsenal de Arsène Wenger, que persigue desde el inicio de temporada un lugar entre los cuatro primeros, y que tratará de aprovecharse del periodo tormentoso por el que pasan sus vecinos del oeste de Londres.
Los ‘gunners', liderados por el español Santi Cazorla, no se moverán de la capital británica el domingo, cuando visitarán White Hart Lane para medirse al tercer clasificado, Tottenham del portugués André Villas-Boas.
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Un día después, el lunes, será el turno de Manchester City, convencido de que todavía tiene opciones de luchar por el título de liga, aunque para eso debería producirse un cambio de ciclo en Manchester United, que se dirige con paso firme hacia la conquista del campeonato.
Los de Roberto Mancini visitarán a Aston Villa dos días después de que los "diablos rojos" hayan disputado su encuentro ante Norwich, por lo que podrían saltar al campo con una desventaja de quince puntos respecto a ellos, o bien con la posibilidad de reducir esa brecha a nueve puntos.
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Decimoctava jornada de la liga inglesa:
Sábado, 2 de marzo
Chelsea-West Bromwich; Everton-Reading; Manchester United-Norwich; Southampton-QPR; Stoke-West Ham; Sunderland-Fulham; Swansea-Newcastle; Wigan-Liverpool.
Domingo, 3 de marzo
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Tottenham-Arsenal.
Lunes, 4 de marzo
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Aston Villa-Manchester City.