"Los grandes pasos para alcanzar la modernización y la reforma se pueden dar en cuatro años", declaró Van Praag en una conferencia en Amsterdam tras enviar este martes su candidatura para relevar al suizo Joseph Blatter al frente de la FIFA.
El presidente de KNVB manifestó su intención de "hacer hueco a nuevas generaciones lo antes posible" y lavar la imagen de este organismo con un "plan de transición" que pretende llevar a cabo en cuatro años.
Van Praag aseguró que mantendrá las "cosas buenas" que esta organización ha conseguido pero actuará de forma diferente en otros aspectos.
"La FIFA ha perdido credibilidad, está siempre bajo sospecha de corrupción y conflictos de intereses", lamentó.
Entre sus propuestas, el holandés se comprometió a fomentar las oportunidades de igualdad para todos y luchar contra la discriminación, pues "el fútbol puede ser el catalizador del cambio" en este sentido.
"Fijaremos objetivos para aumentar la representación de las mujeres en altos cargos", señaló.
También dijo que tomará medidas estrictas contra el amaño de partidos, un problema que "destruye las reglas del fútbol y debe estar en lo más alto de la agenda" de prioridades.
Van Praag apostó por fomentar la transparencia del organismo, pues considera que "la FIFA debe publicar sus gastos".
"No me gustan las promesas vacías, quiero trabajar en las bases de un plan sólido" y extender la competición a más países fuera de Europa, agregó el neerlandés.
A su juicio, urge "impulsar la popularidad del fútbol en los nuevos países participantes" y trabajar por el futuro de un deporte que "pertenece al todo el mundo".
"Espero convertirme en el próximo presidente de la FIFA a finales de mayo", señaló Van Praag.