Cabañas, de 30 años, departió con los jugadores del equipo 'liberteño', que el pasado fin de semana comenzó el torneo del primer semestre del año, y posteriormente los acompañó en los ejercicios físicos, trotes y juegos de recreación con el balón.
"Estoy muy feliz. Contenta de ver a Salvador. Él es un guerrero, lo mueve el fútbol y necesitaba esto, estar con sus ex compañeros", afirmó en rueda de prensa la esposa del futbolista, María Lorgia Alonzo.
Explicó que en diciembre pasado Cabañas fue autorizado por los médicos a "hacer fútbol tres veces por semana" y que a partir de ahora "él va a venir como un jugador regular del Libertad".
"Lo pasado quedó atrás y el año 2011 comenzó bien para nosotros, pues con el América hicimos las paces también", añadió Alonzo con relación a la demanda que el jugador promovió en México contra el América por salarios caídos y su desvinculación unilateral de ese equipo.
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Por su parte, el técnico 'gumarelo', el uruguayo Gregorio Pérez, expresó poco antes que para él "es un orgullo" que ex goleador del América de México pueda volver gradualmente a la alta competición y que está dispuesto "a aportar todo lo que pueda beneficiarlo en su recuperación".
Cabañas, quien todavía tiene alojada una bala en la cabeza, declaró en enero pasado que es consciente de la situación que atraviesa y reafirmó que lo que más desea es volver a jugar.
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El paraguayo ha sido uno de los mejores delanteros de Sudamérica en lo que va de siglo, con dos títulos de líder goleador en la Copa Libertadores, en 2007 y 2008, y uno en la liga de México, con las Águilas del América, en el torneo Clausura 2006.