El mejor de las primeras 18 jornadas clasificaría automáticamente a la Copa Libertadores y el mejor de la segunda iría a la Copa Sudamericana.
El campeón se definiría sacando dos cuadrangulares con los mejores ocho equipos clasificados en el año. Los ganadores de cada grupo se enfrentarían con los segundos del otro para jugar así dos semifinales. Los vencedores se medirían finalmente en partidos de ida y vuelta por el título y por el otro cupo a la Libertadores (el tercero se daría al mejor de la reclasificación).
La reclasificación también entregaría el segundo tiquete a la Sudamericana y el tercero sería para el campeón de la Copa Colombia.
Por orden de la FIFA, los torneos nacionales del 2010 deben acabar en mayo para permitir la preparación óptima de las selecciones que van al Mundial.