El conjunto suizo supo frenar de nuevo a los ‘blues', tras haber empatado en la primera vuelta en Stamford Bridge (2-2), aunque no impidió que los del portugués se clasificaron para octavos de final de la Liga de Campeones, gracias al empate entre el Steaua Bucarest y el Schalke en Rumanía (0-0).
"Los jugadores estaban cansados, por eso no estoy disgustado con ellos, lo entiendo", comentó Mourinho a los medios después del encuentro, y afirmó que su equipo "estaba dormido y pagó el precio" del esfuerzo del sábado en la Premier inglesa contra el West Ham, en el que los ‘blues' sí se anotaron una victoria (0-3).
"La única cosa positiva es que hemos pasado (a octavos), pero no porque hayamos obtenido un buen resultado, sino porque el Schalke no lo obtuvo tampoco", se lamentó Mourinho.
Tras la derrota, el técnico ‘blue' reconoció que quizá debería haber hecho más cambios en el once que jugó el sábado pero que, "cuando juegan tan bien es una gran tentación mantenerlos y darles más confianza".
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El preparador portugués prescindió de nuevo de Juan Mata y recurrió a Fernando Torres, que, aunque empezó como suplente, tuvo que saltar al campo a cinco minutos del descanso por la lesión del camerunés Samuel Eto'o.
De cara al partido del Chelsea del próximo domingo contra un Southampton, que se mantiene quinto en la Premier, con 22 puntos, Mourinho baraja hacer cambios en la alineación, "no para castigar a los jugadores, sino para aprovechar las opciones que da la plantilla y hacer cambios cuando hay tantos partidos seguidos".
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"Si (los jugadores) no hubieran estado dormidos, ¿cómo habría entrado ese gol? Cuando estás cansado te duermes, piensas despacio y reaccionas tarde", sentenció el portugués, aunque reconoció que el Basilea fue "mejor equipo y merecía ganar".