Este miércoles 28 de mayo el Junior oficializó la salida de la entrenadora Yinaris García, quien estaba al frente del equipo femenino, tras haber “rescindido el contrato de manera unilateral”.
De hecho, de inmediato el club barranquillero le agradeció a la reconocida directora técnica pero dieron su reemplazo. “En su lugar, asumirá la dirección técnica la asistente Sandra Narváez”, informaron.
Pero minutos después de la noticia entregada por Junior, Yinaris García se pronunció a través de sus redes sociales dejando un escándalo que implica a varias futbolistas y todo por “conductas antideportivas” de siete jugadoras.
La entrenadora señaló que tras enterarse de este delicado tema de "amaño de partidos", aseguró que "existen pruebas" que ya están en "manos de las autoridades competentes y espero que por el bien del equipo y del desarrollo del fútbol, se logren esclarecer los hechos".
Acá el comunicado de Yinaris García denunciando apuestas y amaños de partidos de jugadoras de Junior
Como es de conocimiento público, el día de hoy a través de sus redes sociales, Junior F.C informó la terminación de manera unilateral del contrato laboral que tenía con dicha institución. La razón expuesta por parte del personal administrativo designado para tomar tal determinación, está basada en los resultados desfavorables que ha tenido el equipo femenino hasta el día de hoy.
La decisión de dar por terminada la relación laboral, fue dada a conocer al grupo de jugadoras el día de ayer, situación que originó sinsabor por parte de algunas integrantes del equipo, lo que ocasionó que llegaran a mi poder pruebas de que los malos resultados en algunos de los partidos disputados tanto de la liga actual como de la anterior, fueran producto de conductas antideportivas por parte de un grupo de 7 jugadoras, encargadas de amañar los resultados.
Me veo en la penosa obligación de salir a informar la situación que se está presentando al interior del equipo femenino, porque directamente influyó en la decisión que tomó el club de dar por terminada la relación laboral, que además de afectar el buen nombre que he construido a lo largo de mi carrera profesional, también pone en tela de juicio la calidad del trabajo que venía desarrollando dentro de la institución.
De lo anteriormente mencionado existen pruebas, las cuales reposan en manos de las autoridades competentes y espero que por el bien del equipo y del desarrollo del fútbol, se logren esclarecer los hechos y no se permita manchar y deshacer el largo camino que nos ha tocado recorrer, para posicionar el fútbol femenino en el lugar en el que se encuentra hoy en día.
Me duele profundamente como profesional y como persona lo que está sucediendo y con el fin de que no se tergiverse la información y no entorpecer la investigación en curso, próximamente haré una única declaración para ampliar detalles la situación.