"No estoy en estado de shock. A veces se gana y a veces se pierde. La realidad es que a veces no se gana. No estoy feliz, claro. Hemos dado un paso atrás en la calificación, pero tenemos que asumir la responsabilidad. Tenemos cinco partidos por delante para poder terminar entre los dos primeros", destacó Mourinho tras el partido.
El exentrenador del Real Madrid reconoció los méritos del conjunto helvético.
"El Basilea jugó muy bien. Nosotros tuvimos mucho la pelota y ellos apenas crearon oportunidades. El Basilea empató en nuestro mejor momento del partido. Y después de eso nos topamos permanentemente contra su defensa", agregó el técnico luso.
Mourinho reconoció que el Chelsea, "emocionalmente no es un equipo maduro y cuando se encuentra en una posición complicada pasa por momentos difíciles", explicó.
El técnico hizo un doble cambio cuando el Basilea empató. Dio entrada al francés Demba Ba y a John Obi Mikel. "Hice cambios porque tengo que hacerlos. Tengo una estructura de equipo y los jugadores deben luchar por cada puesto. Pero no fueron las individualidades las que perdieron el partido", concluyó.
Publicidad