El delantero peruano del Inter, de Brasil, que lucha por demostrar su inocencia, fue sancionado ocho meses sin poder jugar.
Paolo Guerrero aseguró este jueves que el Swissotel, el sitio en donde concentró la Selección de Perú los primeros días de octubre de 2017 previo al juego con Argentina en Eliminatorias, quiere acabar con su carrera.
“Me siento indignado de estar acá (Perú) y pasarla mal. Se supone que yo tengo que regresar a mi país para celebrar y pasarla bien y no, tengo que venir a dar declaraciones y un montón de cosas más”, indicó Guerrero.
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El delantero peruano dijo, además, que está muy molesto por regresar al lugar en donde, según él, fue contaminado.
“Estoy con mucha bronca de volver a este lugar donde la pasé mal. Estoy castigado ocho meses más y yo estoy luchando por mi carrera. Es obvio que quieren acabar con mi carrera”, agregó el atacante del Inter, de Brasil.
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Por último, Paolo Guerrero contó que el argentino Ricardo Gareca, técnico de Perú, le manifestó “quiere que me siga preparando. Él sabe de mi voluntad de estar siempre en mi selección”, finalizó.
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