Las sanciones impuestas por EE. UU. a Irán hicieron que Nike y Adidas le retirara el patrocinio al equipo nacional.
De nada importó que el seleccionado iraní se clasificara como primero en la confederación asiática y segundo a nivel mundial -Brasil fue primero-, los jugadores tuvieron que comprarse los uniformes y guayos que usarán durante Rusia 2018.
Debido a las sanciones impuestas por el gobierno de Donald Trump a la República Islámica de Irán, tras el retiro de los Estados Unidos del acuerdo nuclear, Adidas rompió el contrato de patrocinio que tenía con el seleccionado iraní y Nike les prohibió usar su calzado.
En el caso de la marca alemana, la federación llegó a un acuerdo para que les vendieran las camisetas con un descuento del 70%. Dichas prendas no tienen diseño exclusivo sino que son parte de una colección genérica, lo único diferenciador es el escudo de la federación en la parte izquierda.
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Para tristeza de los hinchas iraníes, la camiseta de su combinado patrio no podrá ser conseguida en el sitio web de Adidas. Para poderla comprar deben entrar en contacto directamente con el órgano rector de la selección.
De la misma manera, Nike rompió el contrato de patrocinio que tenía con Saman Ghoddus, estrella del equipo, y se negó a venderles guayos a los jugadores iraníes.
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“Las sanciones de Estados Unidos significan que Nike en tanto compañía norteamericana no puede proveer calzado a la selección iraní”, declaró la marca del swoosh.
El técnico del equipo islámico, Carlos Queiroz, reaccionó en contra de la medida: “Los chicos se acostumbran a cierto equipamiento y no está bien obligarlos a cambiarlo una semana antes de partidos tan importantes”.
“Algunos han tenido que comprar zapatillas nuevas o pedirlas prestadas a otros jugadores de sus equipos en Europa”, agregó el seleccionador.