Barcelona, que buscará ante Athletic el quinto de los seis trofeos que procura ganar esta temporada, habrá tenido apenas dos días de descanso cuando vuelva a salir a la cancha el viernes en el choque de ida. Los jugadores azulgranas podrían llegar fundidos a la revancha del lunes.
"Fueron 120 minutos y esperemos que lo acusen un poco", declaró el volante Oscar de Marcos. "Llegamos más frescos y tenemos que aprovechar esa baza".
Barcelona dio un recital de fútbol en el primer tiempo y llegó a estar 4-1 arriba con dos espectaculares goles de tiro libre de Lionel Messi. En el complemento, sin embargo, su defensa regaló tres tantos que permitieron a Sevilla empatar 4-4 y forzar un alargue. Pedro Rodríguez rescató al Barca en la prórroga y evitó lo que pudo haber sido un rotundo fiasco.
Sevilla dio un claro ejemplo de que no hay que rendirse nunca, dijo de Marcos. "Confiaron en ellos mismos, siguieron creyendo y pudieron empatar. Incluso con el 5-4 siguió creyendo. Hay que aprender de ese tipo de equipos y de esas ganas, aunque eso es una de nuestras virtudes".
Para de Marcos, no obstante, es de esperar que un equipo se muestre endeble atrás a esta altura del año. "Al principio de temporada se corrigen muchas cosas y es normal que haya errores puntuales. Quizás, contra Sevilla, tuvo un poco de falta de concentración en algunas faltas. Esperamos poder crear ese peligro y tener esa suerte de hacer gol", dijo el volante.
Habrá que ver qué tanto incide en la psiquis del Athletic la derrota 3-1 ante el Barca en la final de la Copa del Rey de fines de mayo, en un partido en el que los catalanes dominaron a voluntad y en el que Messi causó estragos. El argentino, quien está en un gran año, marcó dos goles, incluido uno memorable, arrancando desde la banda derecha, lejos del arco, y apilando rivales en el camino antes de definir al primer palo desde casi el área chica.
"Uno siempre cree que va a ganar", dijo de Marcos. "Este viernes y el lunes tenemos una revancha y ojalá podamos devolvérsela".
Messi, sin embargo, está en boca de todos en Bilbao, sobre todo sus dos goles de tiro libre ante Sevilla.
"Si a estos equipos no les podemos hacer tampoco faltas estamos jo...", se lamentó de Marcos. "Ese chico (Messi) cada vez hace las cosas mejor" y habrá que evitar ceder tiros libres cerca del área.
Mikel Balenziaga, quien tuvo a su cargo la marca de Messi en la Copa del Rey y fue humillado una y otra vez por el argentino, dijo que no se arrepiente de haberlo custodiado.
"Tenía ganas de marcarlo, era un reto y algo que no había hecho. Lo voy a recordar siempre. Enfrentarse al mejor en un marcaje individual no se vive todo los días, lo repetiría todas las veces que pudiese".
Agregó que cuando Messi está enchufado, es imparable. "Cuando Messi está en su mejor forma, como ante Sevilla, es difícil pararle, pero tenemos que intentarlo, que no entre en juego", manifestó.
"En la Copa del Rey teníamos un plan para que estuviese los 90 minutos encima y aun así demostró que es un jugador diferente. Hicimos todo lo que pudimos hacer, pero no fue posible. Para el viernes esperemos dar un puntito más y no les dejemos hacer el partido que ellos quieran", expresó Balenziaga.
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