Después de 85 minutos de ocasiones y espectáculo por parte de dos de los equipos más ofensivos de la Liga inglesa, el delantero asturiano sentenció el partido con un doblete con el que ya suma diez goles en lo que va de competición y se reafirma como una de las revelaciones de la temporada.
Lejos de amedrentarse por la entidad del rival y el imponente escenario, el ‘Spanish' Swansea de Michael Laudrup salió desde el primer momento dispuesto a discutirle la posesión y el dominio del partido al Arsenal.
Con ambos equipos manteniéndose fieles a su estilo vistoso y de combinación, el partido se convirtió en un bonito espectáculo para la afición, que presenció un amplio carrusel de triangulaciones, pases al primer toque y paredes.
El español Santi Cazorla, menos influyente en el juego de lo que es habitual, y el alemán Lukas Podolski lo intentaban para los ‘gunners' que se veían sobrepasados por la valentía de los cisnes galeses.
A la media hora de encuentro, el Swansea estuvo a punto de avanzarse después de que ‘Michu' peinara un balón y dejara solo ante la portería a Kieron Dyer, que fue muy lento al definir y permitió al central belga Thomas Vermaelen cortar la ocasión más clara de toda la primera parte.
Tras el descanso, Cazorla tomó las riendas del ataque ‘gunner' mientras que la presión más avanzada que ordenó el técnico Arsene Wenger empezó a dar frutos para los de Londres, que impedían la salida del Swansea y recuperaron muchos balones cerca del área rival.
El acoso del Arsenal, que pudo marcar con un disparo de Cazorla detenido por el guardameta alemán Gerhard Tremmel, provocó un cambio de estrategia en los de Laudrup, que se recogían detrás y esperaban su oportunidad en un contraataque.
En una de estas casi se avanzan por medio de una jugada individual del español Ángel Rangel que dejó atrás a dos defensas ‘gunners' y desenfundó un potente disparo que se fue rozando el palo izquierdo de la portería del polaco Wojciech Szczesny.
A pesar de merodear el área rival, el Arsenal se estrellaba una y otra vez por el medio de la zaga rival, demasiado poblado de defensas, o con centros al área que nadie alcanzaba a rematar.
Wenger hizo entrar al francés Olivier Giroud para aumentar los centímetros de la delantera y al inglés Alex Oxlade-Chamberlain para buscar más profundidad por las bandas.
Con las nuevas piezas, el ataque ‘gunner' encontró más espacios en la zaga del Swansea y dispuso de claras ocasiones de la mano de Mikel Arteta y Cazorla, que enganchó un balón aéreo rechazado que no fue gol por una sobria intervención de Tremmel.
Los galeses, por su parte, pusieron el miedo en el cuerpo de los aficionados del Emirates con dos ocasiones de Dyer y del español ‘Michu', desbaratadas en última instancia por dos cruciales intervenciones de Szczesny.
Sin embargo, el guardameta polaco no pudo hacer nada cuando el jugador español, una de las revelaciones de la Premier, se plantó solo ante él y mandó el balón a la escuadra de la portería para marcar su noveno gol en Liga y enmudecer el Emirates en el minuto 87.
No sería el último de la tarde porque en el tiempo añadido y con el Arsenal volcado en ataque, Michu se quedó otra vez solo ante Szczesny y con un chute raso envió el balón al fondo de la red y selló la victoria de su equipo.