Edison Cavani, quien juega con Camilo Zúñiga en el equipo napolitano, estará en la final contra Juventus del 20 o 23 de mayo en el Olímpico de Roma.
"Súper Cavani" llenó de ilusiones a la hinchada napolitana, huérfana de trofeos desde hace 22 años, cuando conquistó la Supercopa, precisamente ante el Juventus, después de ganar la Liga en aquellos años dorados que iluminó Diego Armando Maradona.
El tanto al Siena hizo que la producción anotadora de Cavani alcance las 60 anotaciones en año y medio que viste la camiseta del Nápoles.
Cavani anotó de cabeza en un contragolpe del Nápoles que lanzó el argentino Ezequiel Lavezzi para el centro del eslovaco Marek Hamsik, en una jugada que "La Gazzetta dello Sport" comparó con las que hacía el Real Madrid de los años 80 con Emilio Butragueño, Carlos Santillana y el mexicano Hugo Sánchez.
Cavani es el nuevo héroe de los 60.000 hinchas del San Paolo, que ven en el uruguayo la alternativa que les invita a soñar como en los tiempos gloriosos de Maradona.
Cuarenta y cuatro tantos en la Liga, doce en Europa y cuatro en la Copa de Italia ilustran el balance de Cavani, cuyo último título fue la Copa América con la "celeste" uruguaya.
Cavani sigue siendo uno de los pilares del Nápoles y forma con Lavezzi y Hamrik un tridente de oro que la temporada pasada se ganó la clasificación para la Liga de Campeones, de la que fue apeado en octavos por el Chelsea.
El 18 de septiembre del pasado año, Cavani se ganó definitivamente el corazón de los aficionados partenopeos al firmar un triplete ante el todopoderoso Milan, una hazaña que le valió el título de "rey".
Sus 33 tantos ligueros en la temporada pasada atrajo la atención de varios equipos europeos, entre ellos el Real Madrid que, según se publicó, llegó a ofrecer 50 millones de euros (65,9 millones de dólares) por sus servicios.
"Estamos muy felices por llegar a la final. Todos estamos contentos porque éste era uno de los objetivos que nos habíamos marcado esta temporada", dijo Cavani.