"Fue un honor entrenarlo durante dos años", dijo Guardiola, contento de reencontrarse "con un gran tipo", en la víspera del partido entre los dos equipos en el Allianz Arena.
Pizarro jugó en el Bayern Múnich hasta el final de la temporada pasada, coincidiendo con Guardiola en los dos primeros cursos del español en el club bávaro.
Con 37 años el peruano vive grandes días con el Werder Bremen, el equipo en el que comenzó su dilatada carrera en Alemania en 1999. Desde la tregua invernal es el mejor goleador con 9 tantos, 5 de ellos en las 3 últimas jornadas.
"Cuando el balón le llega en el área, atención... Nueve de diez veces puede transformarlo en gol", dijo Guardiola.
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El técnico bromeó cuando le comentaron la posibilidad de que Pizarro no pueda saltar al Allianz Arena por lesión: "Espero verdaderamente que Claudio juegue, pero que lo haga lo más lejos posible de nuestro área".
Pizarro mostró esta semana su satisfacción por regresar a su antiguo estadio: "la vuelta estará llena de emoción, pero espero que ganemos al Bayern y mejor todavía, conmigo como goleador".
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El internacional peruano alternó sus días entre el Werder Bremen y el Bayern en los tres últimos lustros para convertirse en el mejor goleador extranjero de la Bundesliga con 187 tantos en 405 partidos.
Además figura en la quinta posición en la clasificación histórica de goleadores de la competición.