La manifestación colapsó el tráfico de vehículos durante varias horas y paralizó a buena parte del centro de la ciudad, especialmente la zona del Obelisco.
La fecha de la celebración, 12/12/12, coincidió con el autoproclamado nombre de la hinchada, "La 12", debido a que se considera el duodécimo jugador del equipo más popular del país en cualquier campo y frente a todo rival.
La convocatoria a la movilización fue formulada por hinchas a través de las redes sociales Facebook y Twitter en las últimas dos semanas.
Los hinchas boquenses arriaron la bandera de la ciudad de Buenos Aires del mástil de la Plaza de la República, en cuyo centro está está el Obelisco, e izaron un estandarte con los colores de su club: azul y oro.
"Esta es la fecha, 12/12/12, que no se repetirá hasta dentro de un siglo", afirmaban los hinchas frente a las cámaras la televisión para justificar la multitudinaria concentración.
Tras celebrar, varios grupos asaltaron restaurantes y bares de la zona, robaron y golpearon a transeúntes, rompieron marquesinas, señales de tráfico y contenedores de basura en las calles.
El Gobierno de la ciudad denunció este jueves que hubo "una actitud pasiva de la policía federal" ante los hechos más violentos, aunque once de sus agentes resultaron heridos y fueron detenidos treinta revoltosos.
El club Boca Juniors manifestó este jueves su "repudio" a los hechos de violencia ocurridos en la zona céntrica de la capital, y aseguró que tomará "medidas drásticas" en caso de determinar que hayan sido socios de la entidad los que provocaron los desmanes.
"El Club Atlético Boca Juniors desea manifestar su repudio a los hechos de violencia que se produjeron ayer en las inmediaciones del Obelisco porteño, con motivo de la celebración del Día del Hincha de Boca", expresa un comunicado oficial.
Añade que el "Boca Juniors no formó parte de la organización de la manifestación popular denominada 12-12-12", añade el texto.