"Esta es una puñalada por la espalda. No me lo esperaba. Considero que cuando hay una negociación siempre hay un 'tira y afloje' y finalmente yo estaba aceptando los términos de ellos (los dirigentes del equipo), lo que me ofrecían, pero ya no hay nada qué hacer", señaló Casanova a la prensa.
"Igual considero que di mucho al club y a la camiseta, y ahora hay que tener paciencia y aguantarse las cosas", agregó el jugador uruguayo, quien manifestó que existen ofertas de otros equipos colombianos, pero todavía no se ha concretado ninguna.
El presidente del Once Caldas, Jairo Quintero, declaró al diario La Patria, de Manizales, que Casanova "pidió 30 millones de pesos (14.255 dólares mensuales) para el Torneo Finalización y 40 millones (19.006 dólares) para la Copa Libertadores" que el equipo disputará en 2010.
Las discrepancias económicas entre los dirigentes del campeón del fútbol colombiano y los jugadores también derivaron en la salida del equipo del delantero argentino Ariel Carreño, quien ya firmó con La Equidad, de Bogotá.
Casanova, Carreño y el goleador peruano Johan Fano, quien continuará en el equipo, brillaron con el Once Caldas en el torneo pasado.
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Quintero aseguró que la cifra pretendida por Casanova se salía del presupuesto del conjunto de Manizales.
"Él se ganaba 13,5 millones de pesos (6.177 dólares mensuales) y pidió un aumento exagerado", señaló el dirigente.
Once Caldas contrató al colombiano John Valencia, figura del América de Cali en la pasada campaña, para reemplazar a Casanova.
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El equipo de Manizales recibirá este sábado al Deportivo Pereira, en partido correspondiente a la primera jornada del Torneo Finalización del fútbol colombiano.