[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=ZduS7sJP4xk&feature=youtu.be[/youtube] Ese cántico fue imposible de borrar de mi cabeza este viernes en la mañana. Y cómo no, si 42 mil personas se desgarraron sus gargantas despidiendo así a Millonarios de la Sudamericana y recordándole que su corazón no quiere quedarse sin una alegría en 2012. La eliminación ante Tigre el jueves debe considerarse como una bonita anécdota. Un renacer internacional concordante con el resurgir institucional. Claro, el reconocimiento y el prestigio estaban en juego, también los jugosos premios y lo que hubiese sido una taquilla histórica en la final, pero el hambre del hincha apunta a otro objetivo. La 14, esa lejana estrella que se extravió hace 24 años, debe ser, inevitablemente, el colofón para un 2012 espectacular para Millonarios. Y es que este equipo de Hernán Torres, que se casó con el fútbol bien jugado, con una propuesta lírica inmodificable en condición de visitante, merece un título. Y más que ellos, la hinchada maravillosa del azul de Colombia. La misma que cumple cada tres días, que no abandona, que hincha el pecho con victorias y derrotas, que derrochó agradecimientos al plantel semifinalista de la Sudamericana. Hernán Torres, Mayer Candelo, Wason Rentería, Pedro Franco, jugadores y directivos, sepan que los fanáticos merecen el título de la Liga Postobón. Lo reclaman con el derecho legítimo de quien ama con el corazón. “La 14… tenemos la 14”, debe cantarse el 15 de diciembre en Bogotá. Por Ronny Suárez, en Twitter: @RonnySuarez_
Actualizado: enero 25, 2017 11:58 a. m.