La Federación Mexicana de Fútbol anunció este jueves que el encuentro con los ecuatorianos se jugará en el Memorial Coliseo de Los Ángeles (California, Estados Unidos) el 28 de marzo, y el de Paraguay en el estadio Arrowhead de Kansas City (Kansas), el 31 de marzo.
Después de esos amistosos, México se medirá con Estados Unidos el 15 de abril en el Alamodome de San Antonio (Texas).
Con estos partidos, México comienza su preparación para la Copa América de Chile, que arranca en junio próximo, y la Copa Oro de la Concacaf, que se jugará del 7 al 26 de julio.
México buscará ganar la Copa Oro con el propósito de recuperar el título perdido en el 2013 cuando fue eliminado por Panamá en semifinales y quiere ser protagonista en la Copa América con un equipo alternativo.
Si se toma en cuenta que en la Copa América México jugará con un segundo equipo, la Copa Oro, será para el equipo nacional el inicio del camino hacia el Mundial de Rusia 2018.
Además de tratar de ganar para buscar un boleto para la Copa Confederaciones de 2017, la Copa Oro será la previa de los mexicanos para la eliminatoria de la Concacaf en la que el equipo espera ganar para entrar con autoridad al Mundial.
En el ciclo pasado estuvo a dos minutos de ser eliminado y necesitó vencer a Nueva Zelanda en una repesca para poder ir a Brasil 2014.
En el pasado Mundial, México fue eliminado por Holanda en octavos de final luego de perder una ventaja de 1-0 y sumó su sexta Copa del Mundo consecutiva eliminado en la etapa de los 16 mejores.