El pasado lunes Gomes había sido trasladado a una habitación de planta del hospital Pasteur, de Río de Janeiro, tras permanecer durante quince días en una unidad de terapia intensiva.
El entrenador del Vasco da Gama, de 46 años, se encuentra desde entonces estable desde el punto de vista clínico y neurológico y respira sin la necesidad de aparatos.
Según el último informe médico, ya comenzó a alimentarse por sus propios medios y desde este martes puede recibir visitas de familiares y amigos.
Entre las primeras personas que recibió el entrenador figuraron el presidente del Benfica luso, Luis Filipe Vieira, amigo del entrenador, y el defensa Renato Silva, quien dijo que le vio "tan bien" que "se puede imaginar que dentro de dos semanas estará de vuelta con el equipo".
Esa previsión no fue confirmada por los médicos, quienes dijeron que el entrenador permanece "lúcido", "sin sedantes" e "interactuó" en forma normal con sus parientes y amigos.
Gomes sufrió el derrame cerebral el pasado 28 de agosto en medio de un partido de la Liga brasileña que enfrentaba a su equipo contra el Flamengo y tuvo que ser evacuado del campo en ambulancia.