Ramos visitó la escuela infantil "Vo Thi Thang" de La Habana, donde los niños le recibieron con bailes y música; mientras que varias decenas de seguidores, muchos de ellos con camisetas y bufandas del Real Madrid, le esperaban a la entrada para tratar de conseguir un saludo, un autógrafo o una foto de su ídolo.
"Para mí es una emoción ver a un deportista como él aquí en Cuba. Es algo único porque lo admiro muchísimo", dijo a Efe Roberto, un joven cubano hincha del Real Madrid, que estaba trabajando cerca de la escuela cuando se enteró de que Ramos estaba en La Habana.
"Estoy loco por verlo cuando salga para ver si me firma la bufanda del Real Madrid", señaló el joven, que no quiso perder la oportunidad de ver a un jugador ‘madridista', ya que no lo logró con Raúl González, cuando visitó Cuba hace dos semanas para el amistoso que su actual club, el Cosmos de Nueva York, jugó con la selección cubana de fútbol.
Sergio Ramos llegó a La Habana para visitar proyectos de Unicef en la isla, según dijo a Efe nada más aterrizar en el aeropuerto, aunque no dio más detalles sobre su agenda, ni sobre cuántos días permanecerá en Cuba.
Medios de la isla publicaron que, nada más llegar a la capital cubana, asistió a un espectáculo que ofrecía el grupo de teatro infantil La Colmenita, junto con el ballet de la coreógrafa Lizt Alfonso quien, como el futbolista, es embajadora de buena voluntad de Unicef.
Está previsto que esta tarde Ramos juegue un partido de fútbol con un grupo de adolescentes en un centro deportivo de La Habana Vieja, el casco histórico de la capital cubana.