El Atlético de Madrid logró su clasificación directa para la fase de grupos de la próxima Liga de Campeones al certificar la tercera plaza de la Liga española, en una última jornada en la que el Valencia sufrió para entrar en el máximo torneo continental y confirmaron su descenso a Segunda división el Eibar y el Almería.
La última jornada deparó, como es habitual, emociones a raudales. Alegría y sonrisas para los que cumplieron sus objetivos continentales y se salvaron y lágrimas en las dos localidades que ven despedirse a sus equipos de la categoría de oro, en este caso Eibar y Almería.
El Atlético empató a cero en Los Cármenes ante el Granada en un duelo en el que ambos estuvieron más pendientes de los resultados que se iban dando en otros partidos que de jugar.
Al final el 0-0 beneficiaba a ambos contendientes y el Atlético concluyó tercero tras el Barcelona y el Real Madrid, y evita la previa de la 'Champions', en la que estará el Valencia, que obtuvo un sufrido triunfo en el campo del Almería (2-3).
Publicidad
Dos veces estuvo por detrás en el marcador el conjunto del luso Nuno, pero respondió puntualmente con los goles del argentino Nicolás Otamendi y el argelino Sofiane Feghouli, aunque las tablas no le valían porque el Sevilla iba ganando en Málaga con claridad y el arrebataba la plaza de Liga de Campeones.
Apareció su mejor goleador esta temporada, Paco Alcácer, para firmar a los 80 minutos el tanto de la victoria, que dejó en inútil la conseguida por el Sevilla (2-3) ante el Málaga con tantos de José Antonio Reyes, el argentino Ever Banega y Aleix Vidal.
Publicidad
No obstante, al cuadro de Unai Emery le queda en la recámara la bala de la final de la Liga Europa, que disputará el miércoles en Varsovia ante el Dnipro ucraniano.
Si gana, además de revalidar el título, se ganará también el billete para la 'Champions'.
Por ahora, el cuadro sevillista está en la Liga Europa junto al Villarreal y al Athletic, séptimo tras golear precisamente al cuadro castellonense (4-0) en la despedida de Andoni Iraola, que además marcó en su adiós tras doce años en el primer equipo vasco.
Aritz Aduriz logró un doblete para terminar como el máximo goleador español de la temporada, por delante del rayista Alberto Bueno.
Publicidad
El drama lo vivieron cuatro equipos, Deportivo, Granada, Eibar y Almería. Al final festejaron deportivistas y granadinistas, y lamentaron armeros y almerienses.
El Eibar ganó al ya descendido colista Córdoba (3-0), pero no le bastó, porque el Deportivo dinamitó una jornada que comenzó muy negra para sus intereses al obtener un salvador empate en el Camp Nou (2-2) después de ir perdiendo por 2-0.
Publicidad
El argentino Leo Messi adelantó pronto al conjunto de Luis Enrique Martínez (m.5) y luego pareció rematar al Deportivo (m.59), cuyo planteamiento había sido netamente defensivo hasta ese momento.
Pero el cuadro de Víctor Sánchez del Amo no se rindió y comenzó a soñar con un magnífico Lucas Pérez (m.67).
El Barcelona, con el título ya asegurado y ante las próximas finales de la Copa del Rey y la Liga de Campeones, aflojó el ritmo, se relajó y el Deportivo dio el golpe con el empate, obra del portugués Diogo Salomao (m.76). Todo cambió en nueve minutos para festejo del cuadro gallego.
Nadie quiso más 'agresiones' en el día del homenaje a Xavi Hernández, de su adiós a la Liga tras 17 campañas como azulgrana, y del debut del belga Thomas Vermaelen, y el Deportivo firmó la salvación y la condena al Eibar, que salió damnificado del triple empate con el cuadro gallego y el Granada, al que el 0-0 ante el Atlético le fue más que suficiente.
Publicidad
El Celta despide la campaña octavo al derrotar por 3-2 al Espanyol. Homenajeó a su capitán Borja Oubiña, que anunció la retirada, y supo superarse a la expulsión de su meta Sergio Álvarez.
El cuadro barcelonés se adelantó dos veces por medio de Sergio García, al transformar una pena máxima, y del uruguayo Christian Stuani, pero Hugo Mallo y el argentino Gustavo Cabral neutralizaron su ventaja. El internacional español Nolito puso el colofón a otra buena campaña para zanjar el triunfo.
Publicidad
En el primer encuentro de la última jornada, Levante y Elche igualaron a cero en un partido en el que ninguno se jugaba nada y apenas hubo nada digno de mención. Tan solo sobresalió el fallo de un penalti por parte del visitante Aarón Ñíguez que paró Diego Mariño.