El volante Arturo Vidal protagonizó un nuevo escándalo la madrugada de este martes al participar en una fiesta en un casino cercano a Santiago, según confirmó la Policía a la AFP, en un incidente que fue negado por el jugador.
Vidal concurrió junto a un grupo de amigos al casino Monticello -unos 50 km al sur de Santiago-, donde protagonizó "ruidos y desórdenes" en habitaciones del hotel ubicado en ese mismo recinto, confirmó a la AFP el prefecto coronel de la Policía de la localidad de Cachapoal, Juan Baeza.
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"Arturo Vidal estuvo con unos amigos en el hotel, donde se produjo una situación determinada de desórdenes y a pedido del jefe de seguridad acudió la Policía en forma preventiva por ruidos en el interior de las habitaciones", explicó Baeza.
El jefe policial afirmó que "no hubo ningún tipo de delitos ni tampoco detenidos".
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El hecho ocurrió en medio de los entrenamientos de la selección chilena para el partido ante Paraguay el jueves y ante Bolivia cinco días después por las clasificatorias mundialistas.
Tras el incidente, Vidal se trasladó al complejo Juan Pinto Durán en Santiago para reincorporarse a los entrenamientos, donde negó los hechos.
"Vengo de la casa y desmiento todo esto. Van a seguir ensuciándome la imagen y ustedes me inventan", afirmó Vidal en declaraciones a medios locales.
El volante, de 30 años, salió de la concentración tras un permiso que el técnico de la selección, el hispano-argentino Juan Antonio Pizzi, dio a todo el plantel el lunes por la noche, del cual debían retornar el martes.
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En el mismo casino se produjo en 2015 uno de los peores escándalos del volante del Bayern Múnich de Alemania, conocido por sus salidas nocturnas tanto en Chile como en Europa.
En medio de la concentración de la 'Roja' durante la Copa América de Chile, Vidal chocó su lujoso deportivo Ferrari cuando retornaba a Santiago.
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Este incidente provocó un terremoto al interior de la selección chilena, pero el entonces técnico del plantel, el argentino Jorge Sampaoli, decidió no sancionar a Vidal y permitirle jugar la Copa América, que finalmente ganaría para Chile por primera vez.
El futbolista salió horas después a pedir perdón en medio de lágrimas.