El desplome de los villanos parece no tener fin. El conjunto de Paul Lambert que parecía comenzar a recuperarse del ‘horror' navideño (15 goles en contra y ninguno a favor en tres partidos), con el empate ante el Swansea (2-2), en la Premier, y la clasificación en la Copa frente al Norwich, dio un nuevo paso atrás.
No es que la derrota sea una barrera infranqueable, en una eliminatoria a doble partido que se decidirá el 22 de enero en Villa Park, sino que el Aston Villa fue incapaz de imponer la distancia que le separa de un conjunto de la zona media de la League Two (Cuarta División), al que los derechos de televisión de esta ronda pueden evitar que el club sea intervenido.
El bermudeño Nahki Wells adelantó a los ‘gallitos' del norte, en el minuto 19, y Rory McArdle, en el 76, llevó a las gradas un éxtasis apenas atenuado por un tanto del austriaco Andreas Weinmann, seis minutos después, porque otro defensa, el irlandés Carl MgHugh logró el tercer tanto para los locales, que ya sueñan con la final de Wembley.