El capitán del equipo Sergio Ramos ofreció un pastel en forma de Balón de Oro a su compañero portugués antes de que el plantel se entrenase este martes en Yokohama para preparar el choque ante las Águilas el jueves (10h30 GMT). "¡Felicidades amigo! 2016 ha sido tu año. Te lo mereces", escribió en Twitter Ramos, que por segundo día consecutivo no se ejercitó con el resto de sus compañeros en el estadio Mitsuzawa de Yokohama por unas molestias, aunque no debería faltar a la cita contra América.
A sus 31 años, Ronaldo ganó en 2006 de la Liga de Campeones y la Eurocopa con Portugal, el primer título en la historia de la selección lusa, y se acerca a su gran rival Lionel Messi en el palmarés del prestigioso galardón con el que se premia al mejor jugador del año (4 del portugués por los 5 del argentino).
Tras recibir la felicitación del presidente Florentino Pérez en el hotel de Yokohama, Ronaldo y el resto del equipo se entrenaron a las órdenes de Zinedine Zidane para preparar su asalto al Mundial de Clubes, buscando un segundo título en los últimos tres años.
"Poder añadir un nuevo trofeo a tu palmarés es muy importante. Y además, llevar la insignia de campeón durante un año es una recompensa muy bonita para un profesional. Nos gustaría recuperarla, ya que tuvimos que cederla el año pasado", declaró Ramos a la web de la FIFA.
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El capitán destacó la mejora del equipo tras la llegada hace casi un año de Zidane en el banquillo, después de batir el pasado fin de semana el récord de imbatibilidad en la historia del club (35 partidos sin perder).
"Se están haciendo las cosas bien. Se mantiene la estructura, la base de los jugadores y eso ayuda al bienestar del equipo. El 'feeling' entre los compañeros es mayor, el nivel de entendimiento en el campo también, y el equipo se beneficia. Tenemos buena mezcla de veteranos y jóvenes", declaró.
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El central destacó que "el Mundial de Clubes "nos da la opción de medirnos a otros estilos de juego a los que no estamos tan habituados (...) Siempre hay nuevos retos" y añadió que guarda un gran recuerdo de este torneo, en 2014.
"Fue mi primer Mundial de Clubes (...) Guardo muchos buenos recuerdos de aquel torneo: marqué tanto en las semifinales como en la final y me dieron el Balón de Oro. Cuando se gana el título, ésa es la guinda del pastel", señaló.
Para este torneo, el Real Madrid acude con la única baja del galés Gareth Bale, que fue operado recientemente del tobillo y el primer objetivo es superar a América para plantarse en la final y jugarse el título intercontinental (que sería el quinto para el club blanco) contra Atlético Nacional de Medellín o el Kashima Antlers japonés, que jugarán un día antes la otra semifinal.