"Soy cristiano y también creo, pero en el fútbol no suele servir de mucho", respondió el segundo capitán madridista al ser preguntado por la influencia divina que puede tener que el Papa sea seguidor del San Lorenzo.
"San Lorenzo y todos los argentinos viven el fútbol de una manera muy intensa, es lo bonito, que cada uno defienda a su equipo. Yo, como madridista, defiendo lo mío y vamos a intentar dar una alegría a nuestros aficionados aunque el Papa sea del San Lorenzo", añadió.
"En semifinales, desde el calentamiento, nos sorprendimos por el calor de la afición, parecía que estábamos en casa. El Real Madrid es el equipo de Dios y del mundo, tiene aficionados por donde vamos y debemos recompensarlo", señaló.