"Es un jugador que estaba siendo importante para el equipo tanto a nivel dinámico como a balón parado y su recuperación es una feliz noticia", valoró hoy el preparador deportivista antes de elogiar las virtudes del colombiano, que llegó al club coruñés el pasado verano cedido por el Hércules.
Para Vázquez, se trata de un jugador de los que empiezan a escasear en el fútbol moderno, con un largo recorrido y capaz de aportar en todas las zonas del campo.
"Es un futbolista redondo. Le daría un notable en todas las cualidades técnico-tácticas y físicas. Es potente en el juego aéreo, y un centrocampista de calidad, un jugador de área a área, que en el fútbol actual escasean más. Está en el punto de penalti propio y es capaz de transitar en ataque y estar en el punto de penalti del área contraria", analizó el técnico gallego en rueda de prensa.
Las únicas bajas del Deportivo ante el Betis, a falta del último entrenamiento, son las del central Carlos Marchena, con una rotura fibrilar, y el lateral Laureano Sanabria, que se ha perdido todos los encuentros desde finales de diciembre por una pubalgia atípica.
Vázquez no solo repartió elogios para sus jugadores, sino también para uno de sus rivales, el delantero Rubén Castro, que despuntó con él en el banquillo en la Unión Deportiva Las Palmas a principios de la década pasada y que este año lleva 16 goles en la Liga BBVA, algo que no coge por sorpresa al técnico del Deportivo.
"No me sorprende porque es su rendimiento habitual. Siempre hizo goles en todos los sitios en los que estuvo. Es un goleador rápido, disciplinado. Quiero mucho a Rubén", confesó.