El máximo ente del fútbol está preocupado por el estado del césped del estadio de Rabat que acogerá los cuartos de final y una semifinal del "Mundialito" de clubes (entre el 10 y el 20 de diciembre próximos), según revelan este viernes varios medios marroquíes.
Las últimas lluvias caídas sobre Rabat y la disputa de la final de la Copa del Trono el pasado domingo han dejado el césped en muy mal estado, lo que ha sido señalado por una sociedad británica encargada por la FIFA de controlar los dos estadios donde se jugará el campeonato, en Rabat y Marrakech.
Esa misma sociedad visitará la semana próxima el estadio, sito en el Complejo deportivo Mulay Abdalah, al sur de Rabat, y zanjará sobre si su estado lo convierten o no en terreno "practicable".
La renovación del césped del estadio rabatí ha sido encargada a una empresa española especializada por el Ministerio de Juventud y Deportes, que oficialmente guarda silencio.
Pero el césped no es el único problema del estadio: según el diario "Itihad Ichtiraki", también los deficientes accesos al complejo deportivo y la falta de servicios han sido señalados como defectos de talla de acuerdo con los estándares internacionales.
En la pasada edición del Mundialito, también celebrada en Marruecos, se registró un problema similar cuando la FIFA excluyó el Estadio Adrar de Agadir (sur de Marruecos) por sus deficiencias, y particularmente en lo referente a los accesos al complejo.