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Este fin de semana inician las emociones del brasileirao

El Campeonato Brasileño arrancará con la gran ausencia del Palmeiras, uno de los equipos más laureados del país con ocho títulos nacionales y recién descendido a segunda división.

Corinthians y Atlético Mineiro se presentan como los contendientes más preparados para desplazar del trono al Fluminense en un Campeonato Brasileño que comienza este fin de semana con máxima igualdad.

La contienda, que se prolongará 38 jornadas a ida y vuelta hasta el 8 de diciembre, también cita a pesos pesados con opciones de dar batalla por los puestos de cabeza como Sao Paulo, Gremio o Internacional.

Fluminense, campeón en 2010 y 2012, ha mantenido intacto el equipo del año pasado y pretende seguir su senda triunfal, con jugadores de la selección brasileña como el delantero Fred, el portero Diego Cavalieri y el volante Jean.

El presente campeón es uno de los pocos brasileños que sigue vivo en la Libertadores, lo que le confirma como uno de los equipos más competitivos del país y con un banquillo más amplio, en el que aparecen otros hombres importantes como el portugués Deco y Thiago Neves.

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Corinthians es probablemente el equipo con más opciones de desplazar al campeón, gracias a los refuerzos de peso que hizo a finales del año pasado en la delantera: Alexandre Pato y el peruano Paolo Guerrero, que aportaron mordiente al grupo que ganó la Copa Libertadores.

El equipo entrenado por Tite, que se proclamó campeón paulista el pasado domingo con bastante autoridad, tendrá que buscar un reemplazo para Paulinho, su mejor creativo, que tiene pie y medio fuera del club, según medios locales.

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El tercer favorito en lista es Atlético Mineiro, el equipo que está jugando un fútbol más atractivo en Brasil gracias al buen hacer de Ronaldinho y de Bernard, jugador revelación del año pasado.

El equipo de Belo Horizonte terminó segundo en 2012 y en la presente temporada ganó el título regional de Minas Gerais y firmó hasta ahora la mejor campaña de la Copa Libertadores.

En la liga aspira a la gloria, pero para eso deberá remar contra la historia, puesto que no gana el Campeonato Brasileño desde 1971, año en el que se creó la competición.

Al margen de los favoritos, suena con fuerza el Gremio, uno de los equipos que más se ha reforzado y que confirmó en el banquillo al técnico Vanderlei Luxemburgo tras su eliminación en la Libertadores.

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Gremio tiene a su favor una delantera temible, formada por el chileno Eduardo Vargas y el argentino Hernán Barcos, ambos fichajes llegados al comienzo del año y que cuentan con el apoyo de centrocampistas de calidad como Fernando, integrante de la selección brasileña, y el mundialista Elano.

Sao Paulo también dará guerra, a pesar de que perdió en diciembre a Lucas Moura, su mejor jugador, puesto que aún conserva a figuras como el goleador Luis Fabiano, el centrocampista Jadson y su última revelación, Osvaldo.

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También en la disputa, el Internacional se presenta con el uruguayo Diego Forlán en plena forma y el argentino Andrés D'Alessandro como sinónimo de buen toque, aunque quedan dudas si el club podrá retener al delantero Leandro Damião, que podría ser transferido a Europa.

Con muchas menos pretensiones se encuentran equipos de alcurnia como el Flamengo y el Santos, para los que los puestos de cabeza parecen una misión imposible al estar en plena recomposición de sus plantillas.

En el caso del Santos, la inminente salida de Neymar a Europa, dada como un hecho en el equipo paulista, dejará un vacío imposible de llenar.

La gran ausencia en la liga será la del Palmeiras, uno de los equipos más laureados del país con ocho títulos nacionales, que descendió a la segunda división.

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De esa instancia volvieron a primera el Goiás, Atlético Paranaense, Vitoria y Criciúma, equipo ausente de la elite desde 2004 y que tuvo que penar incluso por la tercera división.

Goiás y Vitoria pasaron dos temporadas seguidas en segunda, mientras que Atlético Paranaense no ha tenido que esperar más que un año para recuperar un lugar entre los grandes.

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