Tras la disputa de las tres primeras jornadas, tras Francia y Suecia, que suman dos victorias y un empate, aparece Holanda con 4 puntos, Bulgaria con 3, Bielorrusia con 2 y cierra la llave Luxemburgo, con 1. En los otros partidos de este lunes Suecia ganó 3-0 a Bulgaria y Bielorrusia y Luxemburgo igualaron 1-1.
Francia salió al Ámsterdam Arena con las ideas muy claras. Presionaba muy arriba, recuperaba el balón rápido y jugaba la mayor parte del tiempo en campo contrario, con su línea de delanteros y centrocampistas ocupando a la perfección los espacios.
Holanda era incapaz de avanzar y además al cuarto de hora perdió por lesión a Quincy Promes, bigoleador en el último partido ante Bielorrusia. Entró en su lugar el delantero del Manchester United Memphis Depay.
A la media hora de juego Pogba conectó un disparo durísimo con el exterior desde muy lejos que el arquero Maarten Stekelenbourg pudo tocar pero fue incapaz de despejar. Fue el séptimo gol en 42 partidos internacionales para el centrocampista del Manchester United.
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La mejor ocasión de Holanda llegó en el minuto 40, cuando Dimitri Payet, en un exceso de confianza, cedió atrás y el balón llegó a las botas de Vincent Janssen, quien tras una buena maniobra en el área pequeña se encontró con el crucial corte de Laurent Koscielny.
- Relajación final -
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Nada más comenzar la segunda mitad Janssen tuvo un nuevo disparo. Recibió un balón en el área y 'cuerpeó' con Raphael Varane hasta que encontró su hueco, pero chutó al exterior de la portería.
Francia había decidido dar un paso atrás y era Holanda la que debía proponer. Con metros por delante Pogba jugó en largo para Kevin Gameiro y el delantero del Atlético controló a la perfección pero se topó con Stekelenburg, que tapó bien la portería (55).
Diez minutos después Pogba rozó el 2-0 con un remate potentísimo de cabeza a la salida de un córner lanzado con rosca por Payet, pero en esta ocasión sí el arquero holandés acertó en su despeje.
Holanda era incapaz de crear peligro y Francia manejaba con maestría la situación, desperdiciando la ocasión de ampliar la diferencia con varios contraataques muy claros.
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Pero el equipo dirigido por Didier Deschamps pecó de relajación y concedió una última bala a Holanda. En el 89 Rick Karsdorp centró y Depay disparó de volea, pero el capitán de los Bleus Hugo Lloris despejó con el puño para entregar los tres puntos a su equipo.