Cuando el reloj marcaba el minuto 92 de la final entre Medellín y Junior; Cristian Marrugo emprendió una corrida de más 40 metros para llegar al arco rival y sentenciar la final de vuelta, de dar el 2-0 contra los barranquilleros y de paso soltar un grito de tranquilidad y desahogo represado por más de seis años en la hinchada del ‘poderoso'.
Pero el camino que culminó con la estocada final de Marrugo contra el Junior, comenzó el 31 de enero ante Atlético Bucaramanga; aquel encuentro terminó 2-2.
Un mal inicio en casa
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En la segunda fecha, Medellín se estrenaba en este 2016 ante su afición, pero perdió, precisamente, contra el Junior. Vladimir Hernández le dio el triunfo a los dirigidos por Alexis Mendoza.
La afición del ‘poderoso' comenzaba a tener dudas sobre Leonel Álvarez y sus dirigidos, no gustaba el estilo de juego del ‘poderoso'.
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A pesar de los triunfos, continuaba la desconfianza
La primera victoria del Medellín se produjo de visitante contra el Envigado; pero su estilo de juego no convencía, además la anotación había llegado a una genialidad de Mauricio Molina, quien a partir de esa fecha comenzó a ser fundamental para los dirigidos de Álvarez en los triunfos contra Cortuluá, Huila y Santa Fe en fechas posteriores.
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La indisciplina, un factor que sorteó Leonel Álvarez
Johan Arango fue una de las contrataciones flamantes del Medellín este año; el volante llegaba como uno de los jugadores con más proyección del balompié colombiano por su buen rendimiento en el Once Caldas. Comenzó con la titularidad y la confianza de Leonel hacia él era "ciega", hasta que Arango la comenzó a romper.
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Los problemas iniciaron el 26 de febrero cuando Arango se ausentó del entrenamiento sin razón alguna. Meses después Arango estuvo envuelto en actos de indisciplina cuando se le quiso realizar pruebas de alcoholemia y el jugador no dejó; la decisión al final, Álvarez decidió retirarlo del plantel.
Un puntero sólido
Este torneo se caracterizó por el constante cambio en la punta, unas veces el líder era Nacional, otras Junior, y en alguna oportunidad lo fue Millonarios, pero cuando el Medellín tomó el primer lugar no lo soltó hasta el final del todos contra todos. Avanzó de primero al sumar 40 puntos en 20 fechas, ganando once encuentros, empatando siete y solo perdiendo dos.
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Se impuso ante Cali y Cortuluá
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En los cuartos de final el conjunto antioqueño se midió contra el Deportivo Cali; en la ida perdió 2-1, pero en Medellín ganó 2-0. Demostró jerarquía al cerrar la llave en su casa y pasó a la semifinal con una gran actuación de Hernán Hechalar, Cristian Marrugo, Luis Carlos Arias y Mauricio Molina.
En la semifinal se enfrentó contra la revelación del torneo, el Cortuluá. En el primer partido ganó 2-1, pero la ventaja no la pudo sostener en casa y perdió por el mismo marcador. Tuvo que definir el paso a la final desde los cobros de penal, instancia en la que David González, demostró su gran nivel para llevar al DIM a pelear su cuarto título en cuatro años, atajando tres penales.
La Final
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La sexta estrella llegó con un Medellín favorito para quedarse con el título sobre el Junior, que había dejado en el camino a Millonarios y Atlético Nacional. El 1-1 en Barranquilla le dio aire en la camiseta para terminar en casa, ante su público y vencer 2-0 a los ‘tiburones'; Marrugo fue el líder, el bastión de un título poderoso.
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Números del DIM
Partidos jugados: 26
Partidos Ganados: 14
Partidos empatados: 8
Partidos perdidos: 4
Goles a favor: 42
Goles en contra: 23
Puntos: 50
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