"Estoy aturdido y apesadumbrado al conocer esta noche como un gran número de aficionados al fútbol han fallecido o resultado heridos tras el partido de Port Said en Egipto", dijo Blatter.
"Mis pensamientos están al lado de las familias de aquellos que perdieron sus vidas esta noche. Es una situación catastrófica e inimaginable que no debería haber ocurrido", subrayó Blatter.
El delegado de Sanidad de Port Said, Helmy Ali al Afny, informó a Efe de que al menos 73 personas murieron, la mayoría por fracturas y hemorragias internas, y 136 resultaron heridas en los enfrentamientos.