La federación inglesa (FA, por sus siglas en inglés) ha acusado al Manchester City de no "controlar a sus jugadores al término del partido contra el Tottenham Hotspur" y podría ser sancionado.
El City tiene hasta el 7 de diciembre para responder a esta acusación y en caso de ser declarados culpables tendrán que hacer frente a una multa económica.
Los incidentes se desencadenaron en el tiempo de descuento, con 3-3 en el marcador. El City dispuso de un contraataque y Erling Haaland recibió una falta en el centro del campo. Simon Hooper, árbitro del partido, dio ley de la ventaja, Haaland se levantó y puso un pase a Jack Grealish que le dejó solo contra el arquero.
Sin embargo, Hooper rectificó y pitó la falta, lo que despertó las iras de los aficionados del City, especialmente de Haaland, que también respondió con incredulidad en redes sociales al vídeo de la jugada del gol.
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No obstante, la Premier League no ha castigado a Simon Hooper, el árbitro que dirigió el Manchester City-Tottenham Hotspur, y se encargará este miércoles de arbitrar el Sheffield United-Liverpool.
El árbitro fue increpado por los jugadores del Manchester City e incluso Haaland mostró su incredulidad en redes sociales por lo ocurrido. La jugada sucedió en el tiempo de descuento con 3-3 en el marcador.
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La Premier League ha entendido que el fallo de Hooper fue un error humano -puesto que es decisión del árbitro dar ley de la ventaja o no en una jugada. y no le castigará esta semana.
Hooper sí fue apartado a principios de temporada al no pitar un penalti de André Onana contra el Wolverhampton Wanderers en la primera jornada de la Premier. Además, fue el árbitro a cargo del partido entre Tottenham Hotspur y Liverpool en el que el VAR no dio un gol legal al colombiano Luis Díaz.