El conjunto de Alex Ferguson no dio pie a la sorpresa en la Copa. Con un once formado por una mezcla de titulares y suplentes, el rival del Real Madrid en la Liga de Campeones ganó con autoridad al Fulham.
El Manchester United tuvo el partido de cara desde el inicio. A los tres minutos, el galés Ryan Giggs abrió la cuenta, al transformar un penalti.
El Fulham, que concentra sus esfuerzos en lograr la permanencia en la Premier, mantuvo el tipo durante la primera parte aunque tras el descanso, Wayne Rooney, que busca minutos para encontrar el tono tras su lesión, amplió la ventaja del conjunto de Old Trafford.
A partir de ese momento apareció Chicharito, que salió desde el inicio en el equipo de Ferguson, que mantuvo al holandés Robin Van Persie entre los suplentes. El mexicano sentenció el choque en el minuto 52 y redondeó la goleada pasada la hora de juego.
El preparador escocés del United movió el banquillo. El brasileño Anderson y Giggs dejaron su sitio al ecuatoriano Antonio Valencia y al japonés Shinji Kagawa. Previamente, Paul Scholes ocupó el lugar de Michael Carrick.
A falta de un cuarto de hora, el Fulham acortó distancias y maquilló el marcador con el tanto de Aaron Hughes.