Tras los actos violentos acontecidos el pasado domingo en el estadio ‘El Campín' de Bogotá, en los que, luego de ser apedreado el bus del Cali, el jugador Juan Guillermo Domínguez salió lesionado con un trauma cráneo-encefálico leve, la polémica de si se debió jugar o no el encuentro aún continúa.
El guardameta del equipo ‘azucarero' Sebastián Blázquez manifestó una vez concluido el partido que ‘'nunca había visto que casi maten a un compañero entrando a una cancha. Nos quedamos solos. No hubo ayuda de parte de los jugadores de Millonarios".
Ante las acusaciones, el volante de Millonarios y máximo líder del equipo en el terreno de jugo, Gerardo Bedoya, expresó que aunque en un principió él y el arquero suplente de los ‘azules' Óscar Córdoba estaban de acuerdo con que no se debía jugar el compromiso, algo sucedió en el camerino.
"Lo que pasó conmigo y con Óscar es que cuando estábamos en el camerino del Deportivo Cali y pensábamos ser solidarios, nos informaron que nuestros compañeros (de Millonarios) ya estaban listos para salir a la cancha. Yo no había hablado con el plantel. Gerardo Bedoya es el capitán, pero no el que manda en Millonarios", manifestó Bedoya.
Publicidad
Para el jugador, lo sucedido en Bogotá ya se había presentado en otras plazas del país y tampoco hubo ninguna ayuda.
"No solamente ahorita no fue solidario Millonarios, si se puede interpretar así. No fue solidaria mucha gente como cuando pasó en otras oportunidades, y no fue solidario ningún otro equipo en Colombia.
Publicidad
Para el guardameta titular de Millonarios, José Fernando Cuadrado, lo sucedido el domingo "fue una situación que se nos sale de las manos. No era lo más indicado aplazar el partido. Hay unos directivos que se encargan de eso".
Millonarios dará como capítulo cerrado el juego ante Deportivo Cali. Ahora sólo hablara del compromiso de este domingo ante Real Cartagena.