El enganche verbal tuvo lugar en el post-partido de la plataforma de pago de Televisión Digital Terrestre (TDT) de Silvio Berlusconi, Mediaset Premium, cuando Ibrahimovic se dispuso a contestar a preguntas y comentarios sobre el encuentro contra el Auxerre, en el que los italianos ganaron por 2 a 0 gracias a los goles del sueco.
Desde el estudio comentaron al ex barcelonista que Sacchi, antiguo seleccionador nacional de Italia, había dicho previamente que, si no hubiera tenido un 47 de tamaño de pie, no habría conseguido llegar a marcar el primer gol.
Este comentario no hizo sino encender la mecha del delantero, quien, por sus palabras, parecía guardar cierto rencor hacia el italiano por algunas declaraciones del pasado.
"Sacchi tiene que aprender a estar callado. También él parece estar celoso porque está hablando demasiado; debe hablar menos en televisión y también en los periódicos. Si quiere algo, que venga a mí. Y si no te gusta como juego, no mires", dijo el sueco en tono desafiante.
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Desde el estudio le explicaron acto seguido que el comentario de Sacchi tenía la intención de ser un cumplido, pero Ibrahimovic contestó que, ya cuando estaba en el Barcelona, el responsable de las categorías inferiores de la selección italiana había hecho declaraciones sobre él.
"Cuando uno habla demasiado, habla demasiado. Tú eres uno de ellos. Si no te gusta como juego, no me mires", insistió el delantero.
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Tras esto y al ver que el futbolista no daba marcha atrás, Sacchi dio por concluida la discusión desde el estudio, pidiendo al sueco que se comportara con algo más de educación y puntualizando que él nunca pretendió ofenderle.
Esta discusión pública entre Ibrahimovic y Sacchi empañó hoy la que sería una jornada de felicitación y reconocimiento hacia el futbolista sueco por su actuación decisiva en el encuentro de Liga de Campeones del Milán ante el Auxerre disputado ayer en el Estadio "Giuseppe Meazza" (San Siro) de Milán.
Algunos medios de comunicación italianos destacaron este jueves que, con la buena actuación sobre el terreno de juego del sueco, han vuelto también las muestras de genio y carácter a las que tenía acostumbrada a Italia cuando jugaba en el Inter de Milán, antes de marcharse al Barcelona en 2009.