La tristeza se apoderó del corazón de los trabajadores de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca , CAR, al evidenciar el abandono de decenas de perritos a las orillas del embalse de Neusa. Muchos de los animalitos esperan un hogar.
Los cuidadores de la represa no explican por qué los desalmados dueños van y los abandonan en esa zona a su suerte.
“Algunos turistas vienen y los dejan aquí en el parque y después se van”, indicó Javier Peña, coordinador del parque embalse de Neusa.
Habitantes de la zona se atreven a afirmar que muchos de los perritos abandonados residen en Bogotá y que sus dueños los dejan en Neusa, muy lejos, para que no puedan volver a casa.
“Estos animalitos se vuelven habitantes del parque que están a la espera de que los turistas o los guardas les den algo de comer. Ellos empiezan a cazar y hacen daños en el medio ambiente, pues aquí hay fauna silvestre”, recalcó Peña.
Para mitigar la situación, varios voluntarios están ayudando a los perritos con alimentación, cobijas y medicinas.
Uno de los casos que más conmovió es el de Oreo, un perrito que, al parecer, fue atropellado y abandonado en vía pública.
“Lo trajimos aquí y le hicimos curación y le pusimos antibiótico”, concluyó el coordinador del embalse.
Varios de esos perritos están esperando tener un nuevo hogar. Si usted desea adoptar a uno, puede comunicarse con la CAR: 01 8000 915 317 - 01 8000 913606.
