Todo estaba listo para que Bogotá tuviera un piloto de reapertura de bares, tras la petición que hoy mismo sería elevada por parte de la alcaldía al Ministerio del Interior, tal y como lo había anunciado la secretaria de Desarrollo Económico, Carolina Durán.
Sin embargo, un trino de última hora de la alcaldesa, Claudia López , deja en vilo esta posibilidad, que fue concertada y moldeada entre el Distrito y representantes del gremio de bares en las últimas semanas.
La aparente desautorización de la alcaldesa a su secretaria de Desarrollo Económico deja en medio a los trabajadores y propietarios de los más de 20 mil bares que, según la Cámara de Comercio, hay en la ciudad y que han permanecido cerrados por un año.
El piloto que hoy está en vilo, entre otras cosas, contemplaba como condiciones para operar:
· Prohibición del baile
· Consumo responsable de licor
· No contempla obligatoriedad del consumo de comida
· Operación solo hasta la medianoche
· Distanciamiento entre mesas de más de 2 metros
· Ventilación natural
· Incorporación de ventiladores especiales
· Carta digital
· Venta de entradas anticipadas
La pregunta que se hacen los dueños y trabajadores de los bares es qué va a pasar ahora.
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“A la Secretaría de Salud le remitieron los protocolos para una eventual apertura de algunos bares de la ciudad. En este instante los estamos evaluando y cuando saquemos nuestro concepto hacia el mediodía nos referiremos sobre el protocolo. La decisión de si se abren o cuáles se abren no está en manos del secretario de Salud, lo dejamos en manos de la alcaldesa y las secretarías respectivas”, explicó Alejandro Gómez, secretario de Salud.
Según el Distrito, antes de la pandemia había 36 mil establecimientos de este tipo en Bogotá, de los cuales 8.500 cerraron sus puertas por la crisis.
