Álvaro Pardo Palencia, un abogado y profesor universitario, iba en su carro cuando lo sorprendió un arroyo en Barranquilla, en la calle 85. Asegura que pensó que no sobreviviría.
La gente aterrada y sin poder hacer nada veía cómo el vehículo se movía sin control por la fuerza de la corriente. El agua lo había cubierto casi en su totalidad.
“Ya yo vengo arrastrado por el arroyo, ya no veo nada porque voy es cubierto de puro arroyo”, relató Álvaro.
“Digo ‘Virgen del Carmen, sálvame, sálvame, sálvame, Virgen del Carmen’, y el carro se estrella contra un muro cuando ya va a entrar en la especie de viaducto”, afirmó.
Por lo difícil del momento, asegura que pensó que no se salvaría del arroyo en Barranquilla.
“Sentí que la muerte me caminaba por el espinazo, fue un momento de terror (…) yo asistí a mi propio entierro, en ese momento uno siente que está es muerto”, sostuvo.
Ahora, tras salvarse del arroyo en Barranquilla, dice que volvió a nacer.