Los techos volaron y los enseres se dañaron con el aguacero que azotó la población. Cuatro barrios fueron los más afectados.
Varios de los damnificados en Los Cocos, Primero de Mayo, Paloquemao y Buena Esperanza
decidieron abandonar sus viviendas por temor a que la lluvia siga causando estragos, como en el hogar de Luis Eduardo López.
"Los muebles, todito eso se dañaron, sillas, todo esto se dañó. El computador del niño que hace las tareas, ahora no tiene dónde hacer las tareas", contó.
Yuli Sanjuan, otra afectada, vio cómo “comenzó a volar todo el techo y prácticamente quedé a la intemperie".
“Yo acá tengo un negocito, por ejemplo, de una vitrinita, una pequeña miscelánea, todo lo perdí, los vidrios todos se partieron, las láminas, fueron casi 65 láminas que volaron de mi casa", agregó.
Las autoridades dijeron que están a la espera de la aprobación de materiales por parte de la Gobernación del Atlántico para brindar ayuda a los damnificados de Santo Tomás, donde declararon calamidad.