Mientras que Rusia invadía Ucrania, las especialistas en natación sincronizada de este último país Maryna y Vladyslava Aleksiiva recibieron mensajes de deportistas rusos que apoyaban el inicio de la guerra. Hoy juran boicotear los Juegos Olímpicos París 2024 si los atletas de la nación agresora reciben el permiso para participar.
Las hermanas gemelas de 21 años, que lograron la medalla de bronce por equipos en los Juegos de Tokio en 2021, tuvieron que huir de su ciudad, Jarkov, cuando empezaron a caer misiles, interrumpiendo sus vidas y su preparación para los Juegos Olímpicos París 2024.
Cuando comenzó la guerra en febrero de 2022 los deportistas rusos fueron excluidos de la mayor parte de las competiciones deportivas mundiales, pero el Comité Olímpico internacional (COI) abrió las puertas a su reintegración, bajo bandera neutra, el pasado mes, añadiendo que su participación en los Juegos de París se decidiría más tarde.
"Quizás sería mejor no permitir a un país terrorista que ha matado a nuestros deportistas", señaló a la AFP Maryna Aleksiiva, tras una sesión de entrenamiento de seis horas en una piscina de Kiev.
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La nadadora dice que recibió mensajes "locos" cuando Vladimir Putin decidió invadir Ucrania. En estos textos los deportistas le decían que el presidente ruso y su ejército lo hacían para ayudar al pueblo ucraniano.
Kiev subraya que al menos 343 instalaciones deportivas han sido dañadas en la campaña militar rusa , incluida la piscina donde entrenaban en Jarkov las hermanas Aleksiiva.
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El COI "debe mostrar que los Juegos Olímpicos son la paz, lo debe mostrar al mundo entero", señala Maryna.
Las autoridades ucranianas acusaron al COI de promover la guerra al abrir la vía de la integración a los deportistas rusos y bielorrusos, país aliado de Moscú que ha cedido su territorio para permitir la invasión.
Numerosos países occidentales también se han mostrado en contra de los planes de la institución olímpica.
El presidente del COI, el alemán Thomas Bach, que ha mantenido buenas relaciones con Moscú, rechazó estos movimientos calificándolos de "injerencias políticas".
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Silencio como indicador
El COI recomendó la reintegración de los rusos y bielorrusos en los torneos internacionales tras lavalidación de las federaciones implicadas, pero solo bajo bandera neutra, "a título individual"
, siempre que los deportistas no hayan apoyado "activamente" el conflicto y no tengan "contrato" con el ejército ruso.
Moscú ha criticado estos criterios, que considera "discriminatorios".
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El clavadista ucraniano Stanislav Oliferchik recuerda que los deportistas de su país no pueden entrenarse de la manera adecuada y viven con miedo, al contrario que los rusos.
"Desde que tenemos una alerta antiaérea, los nadadores y nadadoras en bañador corren a los refugios antibombas y esperan al final de las sirenas", explica, mientras que los rusos "entrenan tranquilamente, en condiciones serenas".
Oliferchik, que se despertó por las explosiones el primer día de la invasión, el 24 de febrero de 2024, solo pudo entrenar una vez en la nueva piscina de su ciudad natal, Mariúpol, conquistada meses después por las fuerzas rusas tras una campaña que dejó la ciudad destruida, con miles de muertos.
Sobre sus compañeros rusos, el clavadista dice que están "en silencio". "Es un indicador, yo creo, de su apoyo a esta guerra", subraya.
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La idea de una participación de rusos y bielorrusos bajo bandera neutra no le convence: "Todo el mundo sabe al país que representan, si hay autorización, nuestro equipo boicoteará".