Emma Raducanu cayó, este jueves, en la segunda ronda del Abierto de Australia. La tenista británica no ha podido completar un buen torneo desde su título en el US Open. Desde que derrotó a Leylah Fernandez en el Arthur Ashe, tan solo consiguió unos cuartos de final en el Transylvania Open.
Raducanu batalló contra un problema de ampollas en el dedo índice de su mano derecha, desde el comienzo del partido. Cuando la número 18 del mundo estaba liderando por 3-2 el primer set, pidió asistencia médica. El dedo afectado fue vendado, pero la molestia era notoria.
La británica, de 19 años, perdió la ventaja que había conseguido y Danka Kovinic se llevó la primera manga por 6-4.
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En el segundo parcial Raducanu luchó y no se dio por vencida. Logró empatar el partido a un set por lado, a pesar de la incomodidad que cada vez se empeoraba, pues recordemos que ella es diestra.
En el último set la número 98 del ranking WTA aprovechó la lesión de su rival y se llevó el encuentro después de un 6-3. Kovinic tendrá que enfrentar a una dura rival, como lo es Simona Halep, en la tercera ronda del primer Grand Slam del año.
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La promesa del tenis británico ya tiene la mente puesta en el gran objetivo de la temporada 2022: Wimbledon.