El fútbol, como negocio, da para todo y más si se trata de Cristiano Ronaldo. Tal vez como una jugada publicitaria o un simple capricho, el representante del portugués, Jorge Mendes, le encomendó una tarea bastante particular a su hija Marisa: administrar las redes sociales del futbolista y máximo ídolo del Real Madrid.
Si bien la joven tiene una licenciatura en marketing y en teoría está calificada para el trabajo, su nombre ha hecho eco gracias a su inobjetable belleza.
A sus 25 años, vive en la capital española y trata de estar lo más cerca posible de CR7 para documentar sus anécdotas personales y así satisfacer a seguidores de Instagram, Facebook y Twitter, entre otras plataformas.