Nicolas Rainville, juez que impartió justicia en el partido entre Niza y Dijon, aseguró que nunca escuchó insultos por parte de la tribuna hacia Mario Balotelli, y que la decisión que tomó al amonestarlo fue justa.
El árbitro Nicolas Rainville, que amonestó con una amarilla a Mario Balotelli el sábado cuando el atacante del Niza se quejaba de ser víctima de gritos racistas, aseguró "no haber escuchado ni insultos ni gritos de la grada", afirmó este miércoles en un comunicado el Sindicato de Árbitros de Fútbol de Élite de Francia (SAFE).
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"Si yo hubiera escuchado gritos de mono como los que señala el Niza no hubiera en ningún momento mostrado una amonestación a Mario Balotelli. Puedo comprender una reacción así de un jugador víctima de ese tipo de insultos", afirma Nicolas Rainville en el texto.
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En la derrota del Niza en Dijon (3-2) el sábado, Balotelli vio la amarilla tras gestos airados contra el público. Luego indicó al árbitro que estaba siendo víctima de gritos racistas.
El caso será examinado el jueves por la Comisión de Disciplina de la Liga de Fútbol Profesional francesa (LFP).
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