Brasil salió silbado en la victoria 1-0 ante Sudáfrica

Brasil, que inició el compromiso con un equipo netamente ofensivo con los creativos Lucas y Oscar y los delanteros Neymar y Leandro Damiao, no mostró el fútbol deseado por los exigentes hinchas que comparecieron en el estadio Morumbí, ni el que se espera del equipo que está siendo preparado para disputar en casa el Mundial de 2014. Los pupilos de Mano Menezes necesitaban una clara victoria para reconciliarse con los hinchas tras perder el oro en los Juegos Olímpicos de Londres, en los que fue derrotado en la final por México. Pero tan sólo lograron imponerse a Sudáfrica con muchas dificultades por la mínima diferencia, con un gol del suplente Hulk, lo que agravó su relación con la afición. Los abucheos comenzaron en el primer tiempo de forma tímida y fueron aumentando hasta ser constantes en la segunda etapa. Además de las críticas a Neymar, a quien los hinchas de Sao Paulo cuestionaron sus seguidas caídas, los aficionados pidieron a gritos la convocatoria del punta Luiz Fabiano y quien actualmente destaca en las filas del Sao Paulo. Los hinchas comenzaron a impacientarse incluso por los problemas fuera de la cancha. Ello debido a que el partido comenzó con 17 minutos de atraso debido a que el color de las camisas de las dos selecciones era muy parecido y, como el segundo uniforme de Sudáfrica también lo era, Brasil tuvo que cambiar su tradicional camiseta amarilla por la azul. La primera oportunidad clara de Brasil sólo se produjo a los 16 minutos, cuando el zaguero Dedé subió más alto que todos los defensas sudafricanos y remató con la cabeza un levantamiento desde la derecha que obligó al portero Khune a mostrar sus habilidades. Pese a que Brasil tuvo un mayor dominio del balón en la primera parte, los sudafricanos crearon algunas jugadas peligrosas. Neymar desperdició una oportunidad de marcar a los 42 minutos tras recibir en el área un lanzamiento de Daniel Alves. El pitido que marcó el final del primer tiempo fue seguido por un fuerte abucheo desde los graderíos. En el segundo tiempo Brasil tuvo mejores oportunidades y con un Neymar más incisivo. Brasil aprovechó que Sudáfrica tuvo que sustituir a dos delanteros en pocos minutos por lesiones para mejorar su marcación. El ídolo Beni McCarthy entró en el lugar del lesionado Dino Ndlovu, pero tuvo que ser sustituido diez minutos después por Bernard Parker, igualmente por lesión. Menezes buscó oxígeno para el equipo con la entrada de Hulk, que la semana pasada fue transferido al Zenith ruso por un valor récord. Diez minutos después de entrar, Hulk anotó el gol salvador de la selección brasileña al aprovechar un rebote del portero Khune tras una invasión del zaguero David Luiz en un área llena de defensas. La anotación tranquilizó un poco a la selección brasileña, especialmente porque silenció temporalmente los reclamos, pero no fue suficiente para mejorar el fútbol de la Canarinha. A dos minutos para el final, Menezes sustituyó a Neymar por Arouca y el astro abandonó silbado. Ficha técnica: 1. Brasil: Diego Alves; Daniel Alves, Dedé, David Luiz, Marcelo (Alex Sandro, m.59); Rómulo (m.63, Paulinho), Ramires, Oscar, Lucas (m.71, Jonas); Neymar (m.89, Arouca) y Leandro Damiao (m.63, Hulk). Seleccionador: Mano Menezes. 0. Suráfrica: Itumeleng Khune; Siboniso Gaxa, Siyabonga Sangweni, Bongani Khumalo, Punch Masenamela; Kagisho Dikgacoi, Dean Furman (m.58, Katlego Mashego), Siphiwe Tshabalala; Thulani Serero; Dino Ndlovu (m.32, Benni McCarthy) (m.43, Bernard Parker) y Lerato Chabangu (m.55, Letsholonyane). Seleccionador: Gordon Igesund. Gol: 1-0, m.74: Hulk. Árbitro: el argentino Néstor Pitana amonestó a los brasileños Dedé, Marcelo y Hulk, y a los surafricanos Chabangu, Gaxa y Dikgacoi. Incidencias: Partido amistoso disputado en el estadio Morumbí, de Sao Paulo, ante 51.000 espectadores. Antes del compromiso fueron homenajeados siete de los jugadores que conquistaron el Mundial de 1958 en Suecia.

Brasil salió silbado en la victoria 1-0 ante Sudáfrica

El gol de Hulk le dio a los brasileños el triunfo en el juego amistoso, pero no convenció a los 50.000 hinchas que asistieron al partido y expresaron su disgusto con abucheos.

Hulk

Tercer tiempo