Roman Abramovich no está convencido de la solvencia ofensiva de su equipo, dado el poco bagaje goleador de los Blues en esta campaña. Fernando Torres y Daniel Sturridge son los únicos delanteros de los que dispone Roberto Di Matteo, que estaría encantado de contar con otro atacante para su equipo.
Abramovich, multimillonario magnate ruso y dueño del club de Stamford Bridge, ha puesto sus ojos en el colombiano Radamel Falcao para reforzar esa zona del juego, y estaría dispuesto a pagar 56 millones de euros para hacerse con el ariete después del fracasado fichaje del brasileño Hulk.
"Ya estamos trabajando para traer a Falcao. El propietario lo quiere, por lo que podremos hacerlo antes de que algún otro club pueda realizar una contraoferta", afirmó una fuente del club londinense al diario británico The Sun.
En la operación con el conjunto rojiblanco, valorada en unos 56 millones de euros, el equipo de Di Matteo estaría considerando la posibilidad de abaratar el coste del traspaso, incluyendo a jugadores que cuentan poco en los planes del italiano, algunos de ellos internacionales absolutos con su país.
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Falcao, de 26 años, ha sido objeto de numerosos rumores en el inicio de la presente temporada después de su actuación frente al propio Chelsea en la Supercopa de Europa disputada en Mónaco, y donde anotó tres goles. El ariete, que marcó 115 en su etapa en el Porto portugués antes de fichar por el Atlético de Madrid, estaría dispuesto a demostrar que es el mejor delantero del mundo en el Campeón de Europa.