Ya empezó la fiesta más grande del fútbol mundial, la Copa Mundo Rusia 2018 y en La Taquilla vamos a conocer si las muy conocidas tarjetas amarillas y rojas, tienen algún valor económico en este magno evento.
Estas herramientas fueron una idea del árbitro inglés Kenneth George Aston. Aston presentó este proyecto a la comisión arbitral de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) en el año 1966. Su idea fue muy bien acogida por el máximo ente del fútbol mundial, ya que permite a los jueces centrales de este deporte tener control en los encuentros deportivos ante situaciones complejas que no fomentan el juego limpio durante el partido, debido a que anteriormente los jugadores con mal comportamiento durante el juego eran amonestados verbalmente.
El primer mundial donde se implementaron estas normas fue México 1970, y el primer jugador que recibió una tarjeta amarilla fue el soviético Anatoli Byshovets por una falta en el minuto 35 durante el partido inaugural del Mundial que disputaron México y la URSS. Cuatro años más tarde, en Alemania 74, el chileno Carlos Caszely fue el primer amonestado con una tarjeta roja en la historia de los mundiales.
Según FIFA, el valor de una tarjeta amarilla o roja para el Mundial de Rusia 2018 será de 7500 dólares (mismo valor que en el pasado mundial), más de 22 millones de pesos, y por fingir una falta, 10 mil dólares, unos 30 millones de pesos colombianos. El pago de estas multas lo asumen las federaciones.
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En el pasado mundial Brasil 2014, la selección Colombia recibió 5 tarjetas amarillas y los jugadores amonestados fueron Pablo Armero, Fredy Guarín, James Rodríguez, Carlos Sánchez y el capitán Mario Alberto Yepes. Los cafeteros pagaron un total de 37.500 dólares, unos 112 millones de pesos, en tarjetas amarillas. No olvidemos que la tricolor fue premiada con la mención Fair Play, que reconoce a los equipos con mejor juego limpio.
Por su parte, la selección de Brasil fue el combinado al que más tarjetas le sacaron en el torneo pasado, con un total de 14, ninguna roja, y el jugador del campeonato con más tarjetas fue Thiago Silva del onceno carioca, con un total de tres cartones amarrillo.
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En total, en Brasil 2014 se sacaron 191 tarjetas, 181 amarillas y 10 rojas. La FIFA recaudó por este concepto más 1,4 millones de dólares.