"Todos (en la Selección) vamos a ayudar a Neymar a ser el mejor del mundo. Él va a ayudar a la selección brasileña, pero la selección brasileña tiene que tener claro que, ayudándolo a ser el mejor del mundo, todos podemos cumplir nuestros objetivos", dijo Dunga en una entrevista a la televisión SporTV.
El entrenador recordó que no será la primera vez que la Selección trabaja para mejorar el desempeño de uno de sus jugadores.
"En 1994 (cuando Dunga era el capitán) trabajábamos para Romario y Bebeto. En otras épocas todo el mundo trabajaba para Pelé, para Jairzinho, para Tostao, para Gerson o para Carlos Alberto. Hay que tener la humildad de hacer el trabajo colectivo y también trabajar para una individualidad para poder ser campeones mundiales", afirmó.
Neymar, de 22 años y considerado como la mayor estrella brasileña actualmente, con 42 goles en 59 partidos con la selección, hasta ahora no ha figurado entre los tres finalistas a mejor del mundo por parte de la FIFA en ningún año.
El entrenador, que fue técnico de la selección en el Mundial de Sudáfrica 2010 y reasumió el cargo tras el fracaso del equipo en el Mundial de Brasil 2014, considera que el fútbol de Neymar mejoró tras su decisión de ascenderlo a capitán del equipo.
"Pese a ser un jugador joven, ya es una referencia del fútbol brasileño y mundial técnicamente. Tras todos los problemas que Brasil tuvo en 2014 por asuntos de liderazgo, le quitamos el peso a otros que estaban siendo presionados y colocamos a Neymar como capitán porque él sabe trabajar bien bajo presión. Él no se intimida, para él no cambia nada", afirmó.
Sobre las críticas de Thiago Silva por haber perdido el puesto de capitán, Dunga dijo que la selección necesita de varios líderes y que hay momentos en que un capitán tiene que tener características específicas para el equipo.
"Fui capitán en la época en que se necesitaba de alguien enérgico. Brasil no podía fallar en 1994 porque era una generación que lo había ganado todo menos un Mundial. Hacía 24 años que Brasil no conquistaba el título. Por eso todo el mundo tenía que concentrarse y ser presionado. Pero el liderazgo que yo ejercía entonces, no sería bueno hoy", dijo.
"La mayoría de los jugadores (de la selección) son líderes en sus respectivos equipos. Tenemos que tener un capitán pero también varios líderes para darle soporte", agregó.
Dunga aseguró que la prioridad de la selección en este momento es garantizar su clasificación al Mundial de Rusia en 2018 pero sin dejar de considerar cada amistoso como una final.
"Los jugadores tienen que tener ambición de ganar", afirmó el entrenador al indicar que, antes de las eliminatorias mundialistas, aspira al título en la Copa América del próximo año en Chile.
"La Copa América es una competición oficial. Si ya le inculcamos a los jugadores que tienen que ganar hasta los partidos de entrenamiento, imagina una Copa América", concluyó.