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El amistoso Gabón-Portugal levanta ampollas en el ambiente del fútbol luso

Defensores y detractores de la realización del partido se cruzan duras acusaciones, que van desde indebidos intereses económicos hasta el desgaste innecesario de los jugadores.

El presidente del Porto, Nuno Pinto da Costa, una de las voces más relevantes en el fútbol portugués, fue el primero en abrir "fuego" contra la celebración del encuentro, que representó para la Federación Portuguesa de Fútbol (FPF) 800.000 euros.

El dirigente censuró el enorme esfuerzo que supuso el viaje de seis horas de avión hasta Gabón, así como la intensa humedad en la que se disputó el partido, al que fallaron varias estrellas de la selección por lesión, entre ellas Cristiano Ronaldo: "Es lamentable utilizar los jugadores de los clubes, que no reciben ningún beneficio, y llevarlos para donde quieran, para un clima totalmente diferente, para así jugar en una humedad terrible y en un campo sin condiciones".

El dirigente, conocido por sus irreverentes declaraciones y apodado 'El Papa' por su peso en el fútbol luso, lamentó de la excesiva utilización del mediocampista Joao Moutinho y del extremo Silvestre Varela, importantes jugadores del club que dirige: "No me meto en el trabajo de los dirigentes y, por eso, no admito injerencias en mi trabajo ni en el de mis propios dirigentes, todavía menos de un presidente que no trabaja conmigo".

Pinto da Costa, quien preside al Porto hace tres décadas, las más exitosas del club norteño, criticó que el amistoso se realizara en una semana de competiciones oficiales, en este caso la Copa de Portugal, e incluso lamentó que el secretario de Estado de Deportes no hubiera impedido la disputa del partido. Los jugadores, dijo, "llegan (a Lisboa) a las 5 horas, después vienen a Oporto y el viernes (hoy) les toca en principio ir a Madeira", archipiélago atlántico situado a 800 kilómetros del Portugal continental donde "los dragones" juegan mañana ante el Nacional de Madeira.

Paulo Bento, sin embargo, arremetió contra el doble rasero de Pinto da Costa y recordó el episodio producido el pasado marzo, cuando el mediocampista del Porto James Rodríguez regresó de un amistoso con la Selección Colombia el mismo día del derbi ante el Benfica, en el que jugó la segunda parte y resolvió aquel encuentro: "Me parece que, o tiene algo contra la FPF y deberá resolver ese problema, o le gusta más la federación colombiana", dijo el seleccionador luso.

Recordó además que el propio James y su compatriota Jackson Martínez también disputaron un amistoso esta semana "un poco más lejos" y con mayor diferencia horaria que el choque ante Gabón.

Humberto Coelho, vicepresidente de la Federación lusa, también salió en defensa del partido del miércoles y argumentó que los honorarios de 800.000 euros por jugar en Gabón fueron una razón de peso: "Respeto a Pinto da Costa porque es un gran dirigente, pero las lamento (sus declaraciones)", señaló el dirigente de la Federación lusa, quien dijo que el partido fue un negocio que interesó "a todas las partes" y recordó que selecciones como Argentina o España también han jugado en zonas geográficas distantes.

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