Ambos entrenadores extranjeros no convencieron con su idea de juego, no consiguieron títulos y debieron abandonar su cargo en el cuadro verde.
Tras los exitosos pasos de Juan Carlos Osorio y Reinaldo Rueda por la dirección técnica de Atlético Nacional, el equipo verde apostó por entrenadores extranjeros, pero fracasó en su propósito.
El primero fue el español Juan Manuel Lillo, quien llegó en julio de 2017 al cuadro antioqueño y casi cinco meses después abandonó el cargo tras haber sido eliminado por Deportes Tolima en los cuartos de final de la Liga Águila-II. Antes había caído en la Copa Águila a manos de Patriotas.
Con Lillo, el equipo fue carente de ideas, no tuvo una identidad definida y su principal debilidad fue la defensa, por eso recibió tantos goles (19 en 26 partidos), cosa que no pasaba con Rueda.
Publicidad
Vea acá: El argentino Jorge Almirón dejó de ser el técnico de Atlético Nacional
Sin embargo, si se mira desde los números, su campaña con el equipo verde no fue tan mala, pese a que no consiguió títulos. El español dirigió un total de 26 encuentros, consiguió 14 victorias, 4 empates y 8 derrotas, con una efectividad del 53,8 por ciento.
Publicidad
El turno después fue para el argentino Jorge Almirón, quien llegó en enero del presente año procedente del Lanús, de Argentina, y dejó su cargo este jueves tras la eliminación con Tucumán en Copa Libertadores.
Almirón tuvo un caso parecido al de Lillo, aunque su rendimiento fue superior al del español. Dirigió en total 43 partidos, de los cuales ganó 23, empató 11 y perdió 9, con una efectividad del 62 por ciento.
No obstante, su equipo no terminó de convencer a la hinchada y perdió dos finales: cayó en la Superliga con Millonarios y perdió la final de la Liga Águila-I con Deportes Tolima. Su más reciente fracaso fue haber quedado afuera de la Libertadores.
Descargue aquí completamente gratis la aplicación de Gol Caracol Resultados
Publicidad