"Los órganos de seguridad deciden in situ las medidas de seguridad a tomar y están en estrecho contacto con las autoridades competentes del Estado y de los estados federados", señala la DFL en un comunicado.
La DFL aludió, asimismo, al habitual intercambio intensivo entre los clubes y las autoridades correspondientes previo a cada encuentro, "con el fin de garantizar al máximo la seguridad".
Previamente, el presidente de la Bundesliga, Reinhard Rauball, había asegurado que no hay motivos para cancelar los partidos de la próxima jornada.
"La jornada va a jugarse", dijo Rauball, también presidente del Borussia Dortmund, que deberá jugar el viernes a domicilio contra el Hamburgo.
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El Hamburgo anunció que reforzará las medidas de seguridad para ese partido al igual que lo hará el Hertha Berlín para el encuentro contra el Hoffenheim que se jugará el domingo en la capital alemana.
"La respuesta de los hinchas es positiva, naturalmente reforzaremos el número de efectivos", declaró el responsable de prensa del Hamburgo, Jörn Wolf.
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"Es absolutamente acertado que juguemos", señaló por su parte el entrenador del Hamburgo, Bruno Labbadia, que se mostró afectado por los atentados de París, que dejaron 129 muertos.
"Es la primera vez que al fútbol le toca tan de cerca. Aún así, no permitiré que eso me limite", dijo.
Explicó que intenta no pensar en el tema y no discutirlo ampliamente con el equipo.
"No es que lo reprimamos, pero cada cual tiene su manera de procesarlo. De vez en cuando también hay que obviar el miedo y las dudas", declaró.
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